04 diciembre 2006

el azar y sus cosas



Existen dos obras de arte que me han marcado mucho... mentira! rayo la papa con ellas! Amelie y Rayuela.
Creo que estaba en segundo o tercero medio, aburrida como siempre, toda una ratona de biblioteca en las horas de religión, paseándome por los estantes, leyendo revistas y otros, de repente me encontré con julito... todos sus cuentos, como siempre leyendo una historia de cronopio o de una esperanza estúpida, hasta que la vi... toda gordita, grande, imponiéndose ante sus vecinos cuentos, al hojearla pense de inmediato en mi total ignorancia de adolescente "no sabía que julito escribiera novelas" pero el trauma fue cuando me topé con el tablero de instrucciones y de alli no me despegué del libro por una semana, todo el mundo sabe que no lo termine esa vez, pero la maga me enganchó de una manera extrema. Cuando logré terminarlo me costaba entender muchas cosas, lo volvi a leer y llegue a la conclusión que prefiero mil veces parís que buenos aires, para mi rayuela = parís=maga=horacio y unos cuantos agregados culturales.
Y Amelie... jajaja esa fue la típica tarde de aturdimiento televisivo, cuando el aburrimiento es extremo y la caja de tontos llama,yo respondi al llamado, pero fue un llamado excelente aquella vez, y empezó el tonto zapping - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -HBO, UNA NIÑITA coMIendose las frambuesas con cada uno de sus dedos, y me quede pegada y la vi completa... completita.
Lo importante de las cosas azarosas es atraparlas porque pasan muy rápido, una hojeada menos, un clik más y caput!